La muerte de Néstor Kirchner a través de los medios.

► Por Rodrigo Rojas

El 27 de Octubre de 2010 había sido marcado en el calendario argentino como el día en el que se llevaría a cabo el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas. Con las debidas recomendaciones del caso, la gente se encontraba, en mayor o menor medida, preparada para recibir a los censistas. Sin embargo, ese día quedará en la memoria de todo el pueblo argentino por otra circunstancia, por una noticia que enlutó al país y determinó que la agenda televisiva sufriera un notable giro, haciendo que el desarrollo del Censo pasara a un segundo plano.

Minutos después de las 10 de la mañana la novedad fue informada por el canal C5N, aunque Crónica también expresó en su pantalla, con una placa negra en lugar de la clásica de color rojo, que los primeros en comunicar el deceso del ex presidente habían sido ellos. Más allá de esta disputa por adjudicarse la primicia, el tratamiento de la información en los medios fue muy similar, casi idéntico. 

Al momento de dar las primeras explicaciones, tanto C5N como Canal 13 se ocuparon de mencionar que Néstor Kirchner ya había sufrido algunos problemas cardíacos en 2010 y brindaron algunas precisiones: el primer antecedente del año fue en Febrero, cuando fue intervenido quirúrgicamente por una obstrucción en la arteria carótida derecha; mientras que el último fue en Septiembre, oportunidad en la que se le practicó una angioplastia en una de las arterias coronarias. 

El 28 de Octubre en el Canal TN, Nelson Castro[1] profundizó sobre esta temática, y lo que uno puede advertir de su discurso es que el ex presidente sabía que su situación era muy delicada y que no obstante eso no tomó las precauciones necesarias para preservar su salud, quizás porque subestimó la complejidad de su estado, al tiempo que se expuso a riesgos innecesarios. Esta reflexión (que se puede interpretar como un intento de buscar culpables), además de estar totalmente fuera de lugar debido al momento en que se pronunció, con una atmósfera de mucha sensibilidad, en medio del shock que había generado la noticia, también entra en contradicción con el informe realizado por otro de los canales informativos. Canal 13, el mismo 27 de Octubre, señaló que desde hacía más de 5 años Kirchner era muy cuidadoso con sus comidas, no fumaba, no tomaba alcohol y se ejercitaba a diario. De esa manera, resulta complicado comprender las declaraciones de Nelson Castro, quien declaró que Kirchner padecía de “enfermedad de poder”, debido a la cual el oriundo de la Patagonia se sentía omnipotente. Resulta sorprendente la declaración del periodista analizando el contexto en el que se emitió, es decir, 24 horas después de la muerte del ex primer mandatario. 

Más allá de esta situación que puede identificarse como una excepción, la cobertura informativa desplegada por los medios estuvo acorde con el ámbito de dolor y congoja reinante en el suelo argentino. En Canal 7 se sucedieron las condolencias de funcionarios oficialistas, líderes internacionales y personas públicas expresamente encolumnados detrás del gobierno nacional, mientras que los canales privados como TN, C5N y Canal 13 (al igual que el resto) además de dichas voces, también dieron lugar a representantes de la oposición para que expresen su pesar. En cuanto a lo que registraron las cámaras también hubo muchas similitudes. La imagen que más se repitió fue la de la gente colmando la Plaza de Mayo para, primero, brindar su apoyo a la Presidenta, y luego acompañar los restos de Kirchner desde la Casa Rosada hasta Aeroparque, lugar de partida con destino a Santa Cruz para su sepelio. La música acompañó casi constantemente a la información brindada por los medios televisivos, al igual que algunos repasos de los momentos más significativos de la carrera política de quien fuera Presidente de la Nación desde Mayo de 2003 hasta Diciembre de 2007.

En la cobertura televisiva primó la discreción. Salvo el mencionado caso de Nelson Castro del 28 de Octubre, no hubo lugar para diferencias ideológicas ni condenas a acciones políticas, ni nada más que pueda ser considerado como inoportuno o hiriente, o incluso descabellado, adjetivo más acorde a lo que fue la reflexión del periodista de TN.